Guía turística: qué hacer y ver en Sevilla
Más allá del cliché
Si de algo es capaz Sevilla es de hacerte feliz: su amplia variedad gastronómica, su agradable temperatura a lo largo del año y la amabilidad de sus gentes son sólo tres de los pilares que sustentan las bases de un enclave sin parangón. Su mes de abril, con Semana Santa y Feria incluidas, sólo es la antesala de lo que la ciudad es capaz de ofrecer: puedes perderte por las zigzagueantes callejuelas del Barrio de Santa Cruz, disfrutar del flamenco puro en el barrio de Triana o dejarte llevar con un buen vino de naranja. Todo eso, y mucho más, a orillas del Guadalquivir.
Así lo ven otros viajeros
Comparte tu experiencia de viaje con #Sevilla, #InstantesIberia y @Iberia
HAND. Have a nice day
Una tienda muy exclusiva para los bolsillos más desahogados.
Marcas y lujo en ropa.
En el barrio del Arenal hay una tienda muy cuidada que ofrece de ropa de diseño y se llama HAND: Have a nice day. Esta 'boutique' de la zona centro tiene ropa de mujer, con marcas como Paul & Joe Sister, Stella Forest, Sonia Rykiel o Pepa Miró. Se encuentra en la calle Adriano 22 y, aunque no esté al alcance de todos los bolsillos, merece la pena visitarla. HAND. Have a nice day, es un sitio elegante y romántico que gestionan dos franceses que viven en España: Stéphane y Thierry. No te pierdas esta tienda multimarca con muchos adeptos en la ciudad, tanto por su línea fresca como por la variedad de colores que presentan las colecciones que traen. También tienen establecimientos en Madrid y Lisboa.
La Pitusa
Si quieres darte un capricho, acércate a esta exclusiva tienda.
Diseños exclusivos.
En pleno casco histórico, en la calle Chicarreros, muy cerca del ayuntamiento, tienes esta pequeña tienda de ropa y complementos de diseño. Se trata de un sitio acogedor que vende marcas exclusivas como Repetto, Anna Sui, Manoush, Chisato, Isabel Marant o Tsumori. Además, también encontrarás zapatos y bolsos realmente originales. ¡Modelos únicos y originales con una calidad inmejorable! La tienda, que por dentro es como una casita de muñecas, no llama mucho la atención desde fuera, así que si vienes a verla fíjate bien en la calle y en su rótulo. En La Pitusa nunca va a faltar la nota de color y de la calidad.
Centro Comercial Nervión Plaza
Todo lo que busques en tiendas o restauración lo encontrarás a la primera en este centro comercial.
Cambió la fisonomía de la ciudad.
Si no te gusta frecuentar mercados y rastros, siempre puedes acabar haciendo alguna compra en un centro comercial. El Nervión Plaza, que abrió sus puertas a finales de los 90, está situado fuera del casco antiguo, en el barrio de Nervión. Este centro comercial está abierto de 10h a 22h y, como todos, tiene una más que variada oferta de productos a la venta: textiles, comida, joyas, electrónica, calzado, etc. Además, dispone de varias salas de cine. La forma más cómoda y barata de llegar es el transporte público, con la parada de metro más cercana con nombre Nervión, en la línea 1.
Mercado El Jueves
Segunda mano, antigüedades y mucho más en este curioso mercadillo callejero.
Descubre este mercadillo a mitad de semana.
A diferencia de muchos mercadillos que hay en Sevilla, éste se encuentra al aire libre y es uno de los más antiguos de la ciudad. Se llama El Jueves porque precisamente se celebra todos los jueves por la mañana. El mercado está en la calle Feria, en el barrio de la Macarena, una de las más singulares y bohemias de Sevilla. El mercado se celebra desde el siglo XIII, y hoy en día sigue conservando su tradición de llenar las aceras con puestos donde puedes encontrar antigüedades y otros objetos de segunda mano. Si lo que quieres es llevarte lo mejor de lo mejor, te recomendamos venir pronto. Si estás buscando tesoros, ¡éste es el sitio indicado para encontrarlos!
Barrio de Triana
Encontrarás diferentes tiendas con mucho encanto en la parte más típica de la ciudad.
Callejear y perderse.
Lo mejor de este barrio que está a orillas del Guadalquivir es perderse por sus calle, ahí es donde realmente encontrarás tiendas que te sorprenderán. Pero lo que no debes descuidar en este barrio son sus mercados, como el Mercado de Triana (junto al Puente de Triana), con puestos de comida, artesanía y unos sitios de tapas muy ricos; el Mercado de Manuel Arellano o el Mercado de San Gonzalo (en la plaza San Martín), donde la calidad de sus alimentos merece la pena. En el barrio de Triana también encontrarás varias tiendas de muebles muy buenas, con objetos de mimbre. El barrio también es conocido por sus exquisitas joyerías y sus tradicionales tiendas de moda.
Tienda Baco
No dejes pasar la oportunidad de llevarte alguno de los productos que aquí se venden para recordar los sabores.
Productos andaluces gourmet.
En cuanto a productos gourmet, en la calle Cuna encontrarás esta tienda delicatessen que tiene más de veinte años y que vende productos andaluces que no te puedes perder: patés, vinos, conservas, chacinas y otro tipo de productos, todo viene muy bien envasado y con empaquetado tradicional. José y Antonio Baco fueron los hermanos que se encargaron de fundar este negocio dando protagonismo al bacalao, pero con el tiempo fueron añadiendo productos variados y denominaciones de origen. Entre algunas de las especialidades que vende la tienda están sus castañas en almíbar, los higos al brandy, el marrón glace o la perdiz en escabeche. También venden un excelente aceite de oliva. Si te gusta experimentar con los sabores o deseas hacer un regalo a las amistades más sibaritas, ¡no te lo pierdas!
El Postigo
En una antigua lonja se ubica este mercado en el que encontrarás la obra de artesanos de la ciudad.
Artesanía sevillana para tus regalos.
Si te gusta la artesanía, éste es uno de los mercados que tendrás que visitar durante tu estancia en la ciudad. El Mercado del Postigo se encuentra en lo que antes era una lonja de abastos. El lugar lleva más de treinta años recogiendo y vendiendo artesanía, además de tener un pequeño espacio con obras de artistas sevillanos. Lo encontrarás cerca de la catedral, en el céntrico barrio del Arenal. No te sorprendas si no te encuentras con un mercadillo como tal, sino que se trata de una tienda de varias plantas, eso sí, muy bien cuidada y decorada al estilo andaluz con un patio interior lleno de geranios. Es un sitio fantástico para comprar regalos: aquí venden vasijas, cuadros, colgantes, esculturas, etc. ¡Lánzate y compra alguna obra o artesanía del mercado!
Mercado del Arenal
Productos típicos y tiendas gourmet para que eches un vistazo y te tomes algo por la zona.
Las tiendas de toda la vida.
En el barrio del Arenal, en la calle Pastor y Landero, encontrarás un edificio lleno de arcos: es aquí donde se ubica el famoso Mercado del Arenal, uno de los más céntricos de Sevilla. Aquí encontrarás tiendas de toda la vida donde los sevillanos van a hacer sus compras diarias, aunque también hay varias tiendas delicatessen en las que merece la pena pararse para comprar algún producto exclusivo. El Mercado del Arenal, que se terminó de construir en 1947, tiene mucha historia, pues antes de convertirse en mercado fue el convento de Nuestra Señora del Pópulo, y posteriormente la cárcel de Pópulo. Entre un pasado de religiosos y presos se abrió camino este mercado popular, en el que además de hacer compras se puede tomar alguna tapa exquisita.
Cerámica Santa Ana
Todo en cerámica en un edificio que ya de por sí es una obra de arte. Perfecto para tus compras.
Para ver por fuera y por dentro.
Esta tienda es todo un museo de la cerámica. La fachada de la tienda es admirable, con sus dibujos de las alegorías de la Prudencia y el Trabajo que pintó Manuel Arrellano a finales del siglo XIX sobre cerámica. Esto contrasta con sus dos portones verdes, dando otra nota de color al exterior de la tienda Cerámica Santa Ana. Este recoveco está situado en la calle San Jorge, en el barrio Triana. La famosa casa de cerámicas se fundó en 1939 en lo que antes era la fábrica de Manuel Montero Asquith. Aquí puedes encontrar artesanía, iluminación, cerámica artística o azulejos. Si encuentras la tienda cerrada, pues ha sufrido varias reformas, por la zona hay varias tiendas de azulejos que también merecen la pena.
Mercado de la Encarnación
Además de un mirador, esta estructura alberga un mercado en el que encontrarás todo tipo de alimentos.
Bajo las Setas.
La innovadora estructura futurista que hay en la plaza de la Encarnación, conocida popularmente como 'Las Setas', aloja en la parte baja varias tiendas que la hacen el lugar ideal para las compras locales. Si te estás quedando en un apartamento, este sitio es ideal para hacer tu pequeña compra de comestibles. Los profesionales de este mercado llevan casi cuarenta años ubicados en esta plaza, han sufrido todo tipo de cambios, y con la construcción del monumento de Metropol-Parasol se han situado en la parte baja del mismo, pero siempre han sido fieles al lugar. La plaza de Abastos del Mercado de La Encarnación tiene unas cuarenta tiendas en las que encontrarás puestos dedicados solo al queso, barras de pescado, verduras y productos típicos de la tierra, entre otros. Si vienes a ver el Metropol-Parasol, ¡no olvides entrar también al mercado!
El Pabellón de la Navegación
Sevilla está muy unida al mar, y aquí muestra algunos de sus tesoros.
Recuerdos de la Expo.
Sevilla no tendrá mar, pero lo que si tiene son varios centros y museos dedicados a esta maravilla de la naturaleza. Ubicado a orillas del Guadalquivir, el arquitecto sevillano Guillermo Vázquez Consuegra diseñó este pabellón para la Expo 92 de Sevilla. Aquí puedes ver una exposición permanente llamada 'Sevilla y la navegación atlántica', donde encontrarás las partes más técnicas y humanas de la navegación. Además, hay una zona de maquetas de barcos que es una maravilla para la vista. Actualmente, en él se organizan diversas actividades, como teatro nocturno y campamentos de verano para niños. Aprovecha para ir al mirador que hay en la Torre Schindler, junto al pabellón, ¡merece la pena!
Museo Arqueológico
La viva esencia de una ciudad milenaria, histórica, culturalmente envidiable.
Los hallazgos más importantes.
Sevilla tiene museos para todos, tanto para quien es un fanático de lo moderno como para los amantes de las antigüedades. Y este museo está destinado a eso, a descubrimientos de arte antiguo. El Museo Arqueológico de Sevilla tuvo su primera sede en el Alcázar, pero más adelante se trasladó la colección al que era el Convento de la Merced. Entre sus colecciones puedes encontrar obras singulares, así como múltiples tesoros: el de Ébora, del Carambolo (piezas de oro y cerámica) o de Mairena. En el recorrido del museo pasarás por la sala de Prehistoria, con objetos que datan del año 2.500 a.C., por la sala de Protohistoria o por otra dedicada al mundo romano, situada en la planta principal. ¡Disfruta la visita!
Museo de Carruajes
Un curioso museo para las mentes más inquietas y curiosas.
El saber no ocupa lugar.
Éste es, sin duda, un museo singular y muy especializado que atrae a los más curiososo. Si es tu caso, descubre su colección de carruajes antiguos. Entre alguno de los tipos de carruajes que podrás encontrar están el Coupe de Gala, que es el tipo que todos conocemos como carroza, o el Mail Coach, el coche para el correo en inglés. Ubicado en la plaza de Cuba 10, en el antiguo Muelle de Mulas, se encuentra el Museo de Carruajes de Sevilla, frente a la Torre del Oro. El edificio fue en su día el convento de los Remedios, mientras que hoy acoge en su planta baja el Museo de Carruajes, sede también del Real Club de Enganches de Andalucía.
Museo de Artes y Costumbres Populares
Una forma muy original de conocer mejor la ciudad y su gente.
La cultura sevillana ante tus ojos.
En pleno Parque María Luisa se encuentra este museo dedicado a la vida popular, ubicado justo en el pabellón Mudéjar, un edificio de estilo neomudéjar de 1914. El museo como tal no se creó hasta 1972, con la finalidad de mostrar al público la riqueza de la etnografía de Sevilla. Como curiosidad, en 1979 se donó el legado Díaz Velázquez al museo como uno de los ingresos recibidos. En el 2001 se adquirió también la colección etnográfica Allepuz, con 168 piezas. En las exposiciones del museo encontrarás vestimentas tradicionales, utensilios de trabajo de la época o instrumentos musicales. Si tienes tiempo, no te lo pierdas, ya que sólo el edificio y su entorno son preciosos. Tiene dos plantas como museo, y la entrada es gratuita para ciudadanos de Estados miembros de la Unión Europea.
Centro Andaluz de Arte Contemporáneo
Un centro dedicado al arte contemporáneo no sólo andaluz, también internacional.
Arte moderno del mundo
La ciudad andaluza, a pesar de conservar mucha historia y mucho arte antiguo, también dispone de un centro dedicado al arte contemporáneo: el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, en el Monasterio de la Cartuja de Santa María de Las Cuevas, situado al otro lado del canal de Alfonso XIII. El centro se inauguró en 1998 y, desde entonces, han pasado por aquí obras de artistas internacionales como Ai Weiwei, Lotty Rosenfeld, Agnès Varda o Bruce Nauman, o artistas españoles como Guillermo Pérez Villalta o Lara Almarcegui. También organizan actividades culturales. ¡Acércate y saca tu vena más artística!
Museo marítimo
Un museo sobre la vida marítima que no debes dejar pasar.
El museo de la Torre del Oro.
La Torre del Oro es el lugar que se eligió para abrir el Museo Naval, en el paseo de Cristóbal Colón, a orillas del Guadalquivir. Si eres amante del mar y de todo lo naval, te recomendamos visitar este museo, donde encontrarás piezas relacionados con la vida marítima de Sevilla como brújulas, animales marinos fosilizados, cartas y grabados, entre otros documentos históricos de valor e interés. También podrás ver los distintos nudos marineros que existen. ¡Ven y siéntete patrón de embarcaciones! Si el tiempo no acompaña para dar un paseo al aire libre, ésta puede ser una opción muy interesante.
Museo del Baile Flamenco
Que el flamenco es un arte que merece un museo como éste es sabido por todos.
Un museo muy especial en la ciudad.
El flamenco es un arte y un baile que se originó en Andalucía y que ha trascendido mucho fuera de España. Con la importancia que ha tenido en la historia y que tiene actualmente el flamenco, era obligatorio que Sevilla tuviera un museo destinado a este arte. El museo del Baile Flamenco se construyó en un edificio que data del siglo XVIII y sobre los pilares de lo que antes era un templo romano, en el barrio de Santa Cruz. Además, en él encontrarás varias salas que te mostrarán la evolución del baile, pasando por artistas como Sara Baras, Antonio Gades o Carmen Amaya. En otras salas se pueden ver pinturas, esculturas o fotografías dedicadas al mundo flamenco. La bailadora Cristina Hoyos promueve artísticamente el museo del Baile Flamenco, además de dirigirlo.
Museo de Bellas Artes
Uno de los principales museos del país te espera en la ciudad para mostrarte la obra de sus artistas.
La pintura sevillana.
Gracias a este museo entenderás un poco mejor la pintura barroca sevillana; por eso, si te gusta el arte y, especialmente, la pintura, deberías visitar el Museo de Bellas Artes de Sevilla. Aquí encontrarás las obras de alguno de los pintores andaluces más importantes, como Valdés Leal o Murillo. El Museo de Bellas Artes es uno de los más importantes de España. El edificio se inauguró en el siglo XVII, pero en esa época se abrió como convento, el de la Orden Merced Calzada, que fue fundado por San Pedro Nolasco. Posteriormente se ubicó aquí el museo actual, en el que es de interés la pintura sevillana del siglo XV al XX. También encontrarás una colección de la época medieval y pintura romántica. El Museo de Bellas Artes está situado en la plaza del Museo, 9, en el casco viejo.
Museo Casa de Murillo
Si admiras la obra del pintor, no dejes de visitar su museo.
El hogar del gran artista.
Aquí pasó sus últimos años de vida el pintor Bartolomé Estebán Murillo, fallecido en 1682. El museo-casa de Murillo está en la calle Santa Teresa 8, en el barrio de Santa Cruz, en un edificio con dos plantas y un patio interior llamativo. En 1972 se creó aquí el museo Murillo, donde se recrearon las habitaciones: la cocina, el dormitorio o el salón, casi a imagen y semejanza a como estaban cuando vivía aún el artista, pero no fue hasta 1982 cuando se inauguró realmente el museo propiamente dicho. Por aquel entonces se podían ver las obras del pintor barroco, pero, lamentablemente, el museo duró poco ya que en 1988 se reformó el edificio y se hicieron oficinas. A pesar de esto, merece la pena visitar su patio interior.
Puente del Alamillo
Obra de Calatrava, es el símbolo de la Exposición Universal que se celebró en la ciudad.
La entrada a la Cartuja.
En 1992, el año de la Exposición Universal de Sevilla, se inauguró este puente diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava. Con 250 metros de largo, tenía como objetivo que se pudiera acceder a la isla de La Cartuja, que fue donde se celebró la Expo 92. Desde lejos, el puente de Calatrava (esto no es cierto) parece una especie de cartabón blanco sobre el río Guadalquivir. La idea inicial era construir dos puentes atirantados, uno mirando enfrente del otro y que fueran idénticos, pero el presupuesto no llegó para hacer dos iguales, por lo que finalmente se hizo sólo uno.
Torre de Don Fadrique
Con espíritu de defensa, es visible desde algunas calles de la ciudad.
La atalaya visible del convento.
Esta torre de estilo gótico-románico se construyó en 1252 por orden del Infante Don Fadrique. Paseando por la ciudad seguramente te topes con ella en el patio del Convento de Santa Clara, exactamente en la calle Santa Clara, 30. Mide unos 65 metros de alto y, como la mayoría, tenía carácter defensivo. La Torre de Don Fadrique está hecha principalmente con ladrillo, aunque tiene varios elementos labrados en piedra, como los sillares del piso bajo o las bóvedas. Verás que el segundo piso tiene un estilo más románico, gracias al trazo de sus ventanas, y el tercero de los niveles es más gótico. Si eres un enamorado de la arquitectura, ¡no te lo pierdas!
Patio de Banderas
La Plaza en los Alcázares te mostrará algunos de los encantos de la ciudad sin moverte de ella.
Naranjos, albero y una belleza sin parangón.
Esta plaza está situada en la zona de los Reales Alcázares. Además de ser pequeña, está protegida por varios edificios bajos que la rodean de tal forma que parece que la esconden. Desde el Patio de Banderas, ya que parece más un patio de vecinos que una plaza, se pueden observar algunas vistas simbólicas de la ciudad: por ejemplo, desde aquí se ve la parte superior de la Giralda o la catedral. Junto a la plaza hay un arco por el que se puede acceder al Alcázar, que da a una estancia conocida como 'El Apeadero', o desde aquí también podrás entrar al barrio de Santa Cruz. Como dato curioso, en alguna de las casas que ves aquí vivían personajes tan importantes como el pintor Valeriano Bécquer o la escritora Fernán Caballero.
Metropol Parasol
Un curioso mirador desde el que observar los contrastes de la ciudad.
Las Setas de Sevilla.
Los paseos al aire libre deparan muchas sorpresas, y una de ellas es el Metropol Parasol, una estructura de madera gigantesca de 26 metros de altura, ubicada en la Plaza de la Encarnación. Todo el mundo la conoce como 'Setas de la Encarnación' porque tiene forma de hongo. El arquitecto berlinés Jürgen Mayer fue el autor de esta obra moderna que ha cambiado el centro de Sevilla desde su inauguración en 2011. Se puede subir a su mirador para apreciar las vistas espectaculares del casco viejo de Sevilla y admirar el contraste entre la arquitectura antigua y la del propio Metropol Parasol. El acceso a la pasarela que recorre su parte superior cuesta 1,40 €, si no has nacido en Sevilla o no eres residente. El mirador está abierto desde las 10.30 hasta la medianoche, y los fines de semana hasta la 1.00h.
Judería de Sevilla
Pequeñas calles, túneles y casitas blancas es lo que encontrarás dando un paseo por la judería.
Un barrio emblemático.
Éste es uno de los barrios que no puedes dejar de visitar, ya que hay aquí un aire conmovedor y un encanto especial. Éste es el barrio que habitaba el pueblo judío desde la reconquista de Sevilla, en el siglo XIII, hasta su expulsión, dos siglos después, cuando empezaron a reinar los Reyes Católicos. Aunque el barrio ya no existe como tal, los sevillanos siguen conociéndolo como La Judería, y en la actualidad forma parte del barrio Santa Cruz, en el casco antiguo. Recorre sus calles estrechas y los pequeños túneles que enlazanlas diferentes casas. La zona tiene a veces un trazado en zig-zag que llama la atención y que hará que te sientas en una especie de laberinto rodeado de casas bajas y blancas. ¡Aprovecha para perderte!
Calle Sierpes
Callejear por la ciudad es una maravilla, no dejes de hacerlo por esta calle comercial.
Las compras por antonomasia.
Si te gusta callejear, Sevilla está llena de calles con encanto, algunas más retiradas y solitarias y otras más transitadas, como la calle Sierpes que, a pesar de ser una calle muy concurrida por su carácter comercial, merece la pena recorrer. Está en el centro de la ciudad y es una calle peatonal, lo que facilita su disfrute. Anteriormente, allá por el año 1248, la calle se llamaba Espaderos, pero no fue hasta el siglo XIV cuando se cambió el nombre al de la Sierpe y, posteriormente, pasó a llamarse calle Sierpes. En ocasiones, en la calle hay música en directo, mimos y vendedores ambulantes.
Plaza de América
Mientras estás en el Parque de Maria Luisa, acércate a ver esta plaza rodeada de importantes edificios.
Una plaza principal.
Esta plaza se construyó con motivo de la Exposición Iberoamericana de Sevilla en 1929. La Plaza de América, obra del arquitecto sevillano Aníbal González, está justo al lado del Parque de María Luisa. Lo bonito de esta plaza, además de sus palmeras y su ambiente, es que está rodeada de tres edificios impresionantes: el Museo de las Artes y Costumbres Populares (antes, el pabellón Mudéjar), donde verás que tiene aplicaciones de cerámica, el Pabellón Real y el Museo Arqueológico. La plaza tiene también un par de glorietas que resultan interesantes de ver y que están dedicadas a varios personajes. ¡Acércate y lo descubrirás!
Cañada de los Pájaros
Si quieres pasar un día diferente, quizá te interese acercarte hasta aquí y divisar sus numerosas especies de aves.
¿Te gustan las aves?
Si quieres salir un poco de las típicas rutas de Sevilla y dejar de callejear por sus maravillosas calles durante un rato, siempre puedes seguir haciendo actividades al aire libre. Si te gustan los parques zoológicos, visita la Cañada de los Pájaros, a 24 km del centro de la ciudad, en la comarca de Doñana, y a 10 km del Espacio Natural de Doñana. Cañada de los Pájaros ha sido declarada en 1991 Reserva Natural concertada por la Consejería de Medio Ambiente. Lo que puedes observar aquí es la avifauna más variada de Europa, con entre 150 y 200 especies. Podrás ver algunas familias que se encuentran en peligro de extinción, como la cigüeña negra, la cerceta pardilla o la garza imperial. ¡No te lo pierdas!
Jardines de Murillo
Pasea por estos jardines para refrescarte y admirar las obras de artistas locales que en ellos hay.
Tómate un respiro.
En Sevilla hay mil rincones por donde pasear y sentir la explosión de la vegetación y arquitectura andaluzas. En la ciudad hay un par de joyas verdes que no hay que dejar de visitar, y una de ellas son los Jardines de Murillo, situados en la avenida Menéndez Pelayo. Estos jardines se llamaron así porque estaban cerca de donde nació el pintor sevillano Bartolomé Esteban Murillo. En 1911 se cedió una parte de la Huerta del Retiro del Alcázar para la realización de estos jardines que fueron diseñados por Juan Talavera y Heredia. Aquí encontrarás una gran variedad botánica, con especies como la buganvilla, el bonetero de Japón, el árbol de Júpiter, magnolias o plátanos híbridos, entre otros. Además, durante el paseo podrás ver algunas obras dedicadas a personajes importantes, como una glorieta en homenaje al pintor José García Ramos.
Feria de Abril
Una vez en la vida se debe visitar esta fiesta y contagiarse de su espíritu.
La fiesta por excelencia.
Ésta es la gran fiesta de Sevilla y una de las celebraciones populares más conocidas de España, que tiene lugar una vez al año. Si justamente estás en abril visitando la ciudad andaluza, ¡vive la Feria de Sevilla y enamórate de su música, baile y gastronomía! La Feria de Abril nació en 1847 como feria ganadera, pero hoy nada tiene que ver con aquella feria del siglo XIX. Aquí la gente vive de corazón esta fiesta popular vistiéndose con los trajes típicos andaluces, ellos con el traje corto y ellas con el vestido flamenco o de gitana. Verás carruajes y casetas que, aunque la mayoría son privadas, también hay algunas públicas. La Feria de Abril dura una semana, tal vez estés por Sevilla en esta fiesta tan sentida.
Patio San Eloy
Haz una parada y tómate algo en este típico bar de tapeo.
Tapear sentado en una grada.
Lugar ideal para tomar el aperitivo o para comer, ya que ofrece una excelente oferta culinaria. Es el típico bar de paso, de cultura de barra y jamones colgando donde se tapea rico, tanto tapas frías como calientes. El lugar tiene un par de escalones o gradas, donde la gente se sienta con su vino y su plato. ¡Pide tu ración o tapa en la barra y llévatela a las escaleras de azulejos! En ocasiones está tan lleno que parece una grada repleta de público que va a ver un espectáculo. En Sevilla encontrarás varios Patios San Eloy; los más céntricos están en en los barrios de El Arenal, Santa Cruz y Triana. Son fáciles de reconocer porque todos tienen por fuera un gran dibujo flamenco hecho a base de azulejos con el nombre de El Patio. Si buscas un sitio donde comer rico y económico, ¡no te lo pierdas!
El Rinconcillo
Tanto para comer como para tapear, visita este lugar y curiosea su interior.
Tapas con solera en la ciudad.
El Rinconcillo se erige orgulloso como el bar más antiguo de Sevilla: abrió por primera vez en 1670 y desde entonces no ha parado de servir tapas estupendas. No te pierdas sus interiores, entre los más auténticos y encantadores de la ciudad en lo que a bares se refiere. ¡El sitio por dentro no puede ser más curioso! Pásate a tomar un vino para conocer donde antiguamente, se dice, estaban los comedores de un convento, y aprovecha para probar sus menús que salen entre 28 y 52 €, con platos de lujo como parrillada de marisco, gambas de Huelva o arroz caldoso con bogavante. También puedes optar por sus tapas, más económicas, como pavías de bacalao, chocos o coquinas de la casa.
Los Coloniales
Dos lugares para ir y probar sus especialidades, todas muy sencillas y ricas.
Comida sencilla y de mucha calidad.
Hay dos tabernas Coloniales, en la plaza Cristo de Burgos y en la calle Fernández y González. Antes, en estas tabernas se vendían productos coloniales, de ahí su nombre, pero no fue hasta 1994 cuando Eugenio García rescató la imagen del local. Los Coloniales ofrecen siempre comida española excelente, como sus tostas típicas de salmorejo y chacina, el solomillo, o el crujiente de berenjenas con salmorejo, aunque también tienen postres deliciosos como el de 'la tía Pepa'. Estas tabernas se llenan hasta arriba, por lo que si vas acompañado no olvides reservar antes. Si estás por Sevilla, ¡pásate!
Mesón Cinco Jotas
Hay dos en la ciudad, con platos igual de sabrosos.
Un restaurante de bandera.
Este mesón forma parte de una cadena de restaurantes de alta calidad distribuidos por varias ciudades. El Mesón Cinco Jotas de Sevilla tiene dos restaurantes, el Cinco Jotas Arfe y el Cinco Jotas Albareda: el primero, con vistas a la plaza de la Maestranza, se sitúa en la calle Castelar; el Albareda lo podrás encontrar en la calle Sierpes, muy cerca de los Reales Alcázares y la catedral, y cuenta con una terraza muy concurrida en verano. En los mesones Cinco Jotas disfrutarás de buena materia prima a un buen precio. En estos mesones puedes degustar sus famosas croquetas de jamón 5J, de jamón de bellota o de caña de lomo. Además de la fama de su jamón, también se recomienda probar otras tapas o el salmorejo. Aquí tiran muy bien la cerveza, así que puede ser una buena opción para refrescar la garganta.
Casa Pepe Hillo
Tapear en un bar taurino es algo imprescindible en tu visita a la ciudad.
Vinos y tapas exquisitas.
En el barrio El Arenal, cruzando el río desde Triana, está este bar de tapas cuyo nombre hace homenaje al torero sevillano Pepe-Hillo. Su decoración es de carácter taurino, con grabados de corridas de toros, cabezas de toros en sus paredes e incluso utensilios de labranza. El bar siempre está lleno, resultando en ocasiones difícil encontrar una mesa libre, pero tiene un ambiente muy agradable y animado. El menú tiene platos clásicos pero también tapas con especialidades de la casa. Se aconseja probar las patatas con alioli con lagrimitas de pollo, las espinacas con garbanzos o el queso frito con mermelada. Su precio medio ronda los 15 €. Si estás por el casco viejo, ¡no dejes de probar un vino y un par de tapas del Pepe Hillo!
Álvaro Peregil
Una taberna típica en un barrio característico de Sevilla para disfrutar de su tapeo.
Auténtica taberna andaluza.
El barrio de Santa Cruz, que llama la atención por sus callejones y casas blancas, es uno de los más importantes de Sevilla. Es aquí donde encontrarás esta taberna típica andaluza, la de Álvaro Peregil, que abrió sus puertas a finales de 2008. Verás que en Sevilla hay varias Tabernas Peregil que son bares para tapear, y en ellas podrás degustar huevos rotos, alcachofas, tortilla de camarones y muy diversas tapas. La Taberna Álvaro Peregil está decorada con azulejos sevillanos pintados a mano por el ceramista Manuel Ruíz Gil. ¿Una recomendación personal? Asegúrate de probar su célebre vino de naranja, uno de los secretos mejor guardados de toda la ciudad.
Kiosko de Las Flores
Raciones deliciosas de lo más típicamente andaluz, el 'pescaíto frito'.
Frituras de pescado y más.
El sitio perfecto para comida churruscada: calamares fritos o pescaíto frito. En 1930 se fundó el Kiosko de Las Flores en la calle Betis, en el centro de Sevilla. Te invitamos a que disfrutes de su comida en su terraza junto al río Guadalquivir. Entre sus especialidades destacan la merluza en tacos, las gambas fritas, las puntillitas, las acedías o el cazón de adobo. Pero no todo aquí son frituras, también tienen quesos, gambas a la plancha, menestra de verduras, carnes y paellas. El Kiosko de Las Flores goza de gran renombre en la capital andaluza y viene a ser un lugar de culto para los amantes del pescado frito. Recuerda que abren todos los días excepto los lunes.
Restaurante Las Lapas
Tómate algo en su terraza para refrescarte y descansar.
¿Lo mejor? Su excelente terraza.
La terraza que tiene el restaurante Las Lapas, situado muy cerca de los Reales Alcázares, es el sitio perfecto para comer y cenar en verano, uno de los mejores puntos para hacer una parada gastronómica. El restaurante abrió en 1971 y es un restaurante conocido para tapear. Sus platos principales están exquisitos: solomillo de ternera, paella o bacalao de Islandia con tomate son algunos de los platos que podrás probar; como entrantes, tienen jamón ibérico o alcachofas con gambas. Su precio medio está entre los 25 - 30 €, pero si sólo quieres una tapa y un vino encontrarás opciones a buen precio. ¡Lo mejor será que te pases por aquí!
Antigua Abacería de San Lorenzo
Antigua abacería que mantiene su espíritu para que te tomes un vino y una ración.
Un tapeo abundante.
En el barrio de la Macarena, esta abacería ocupaba en sus comienzos una parte de la planta baja de una casa antigua del siglo XVII, pero terminó ocupando todo el inmueble. Las abacerías eran pequeñas tiendas donde se vendían productos alimenticios al por menor y donde el vendedor te daba a probar los productos que estaban a la venta, a veces acompañados con una copa de vino. Cuando entres a la Antigua Abacería de San Lorenzo verás que, efectivamente, el lugar y la decoración aún conservan aquellos elementos de las tiendas tradicionales: estanterías con productos alimenticios, un peso antiguo o vitrinas con legumbres y productos locales. Hoy en día se mantiene el concepto y sirven aquí vinos blancos y tintos, chacinas, quesos, pisto, mejillones o platos más contundentes como bacalao dorado, setas con tallarines o revuelto de papas, todo ello a un precio inmejorable: los platos rondan los 6-12 € y sus copas de vino unos 2 €.
Casa Robles
Tanto si quieres comida típica como algo más internacional, en este restaurante acertarás.
Excelente comida y calidad.
Casa Robles fue fundada por Juan Robles allá por el año 1954. Antes de ser restaurante, fue una bodega que poco a poco evolucionó hasta convertirse en bodega-bar y, ya en 1964, se transformó en lo que vemos hoy, un restaurante con productos de primera calidad. La cocina del restaurante Casa Robles mezcla la gastronomía mediterránea con la internacional, pero donde siempre prima la base de la cocina andaluza. Lo mejor es que vengas a probar alguno de sus platos: 'Caña de Lomo', chocos, ventresca de atún, salmorejo o presa ibérica que viene a ser carne de cerdo ibérico; con un precio medio aproximado de 40€. ¡Aquí todo merece ser catado! Casa Robles se ha vuelto ya un clásico en Sevilla.
Elefunk
En plena calle Betis encontrarás este local lleno de variedad musical para una noche de bailoteo.
Música internacional y buen ambiente.
Para quien esté deseando bailar funk, hip-hop, R&B, broken beat, groove o música afroamericana, ¡el club Elefunk es su sitio! Proponen noches temáticas de música, por ejemplo, los miércoles el estilo es más de hip-hop, R&B o música disco de los 70; los jueves y domingos escucharás jazz, funk y soul, mientras que los viernes broken beat y los sábados hay música variada pinchada por dj´s locales y nacionales. Además, en Elefunk encontrarás precios económicos, las copas cuestan 5 €, y el ambiente es agradable, multicultural y divertido. Encuéntralo en la calle Betis, justo a orillas del río Guadalquivir en el famoso barrio de Triana.
Teatro Lope de Vega
Visítalo por si te interesa su agenda, además de por su edificio y ubicación.
Teatro clásico en la ciudad.
Muy cerca del espectacular Parque María Luisa está el que ha sido escenario de importantes espectáculos de ópera, danza, teatro... El teatro Lope de Vega, con un estilo neobarroco, fue obra del arquitecto Vicente Traver, cuya construcción comenzó en 1927 y se terminó dos años después. Verás que el teatro tiene una cúpula que actualmente es la entrada de honor. Entre su programación podrás ver obras de Calderón de la Barca, Diego Velázquez de Puerco u obras de Shakespeare. Este teatro es un clásico en Sevilla, ¡no pierdas la oportunidad de ver alguna de las grandes obras de los dramaturgos clásicos! El precio de las entradas varía según la obra, podrás informarte de su programación y precios en mismo el teatro.
Casa Anselma
Disfrutarás de una noche diferente con música y bailes a cualquier hora.
Una copa muy típica.
Sitio castizo a no poder más. No pienses que Casa Anselma es un club o un lounge, sino todo lo contrario, es un bar de copas de toda la vida, típico sevillano y con decoración flamenca. En este rincón popular podrás disfrutar de conciertos flamencos donde la gente toca en sillas típicas que llaman 'rocieras'. Lo mejor de todo es el espectáculo y la decoración. No te pierdas una de sus actuaciones más conocidas de la noche, la de la propia Anselma cantando, la misma que saluda a la gente al entrar. Abren sobre las 23.30 y cierran hacia las 4 de la mañana, así que puedes tomarte aquí la primera o la última copa de la noche. Además, tienen un precio muy económico. ¡No tienes excusa!
Naima Café Jazz
Puedes disfrutar de buena música y buen ambiente olvidándote por un momento de donde estás.
No todo es flamenco.
En pleno casco histórico de Sevilla, en la calle Trajano, se ubica este peculiar café. El lugar es pequeño y está lleno de mesas redondas y paredes repletas de fotografías con los máximos exponentes del jazz y blues, además de músicos de jazz locales. El Naima Café Jazz es ideal para tomar una copa mientras se escuchan las versiones de los grandes del jazz. Los conciertos en directo empiezan a las 21.30 casi todos los días de la semana, y no hay que pagar entrada. Dentro del café también hay una tienda que vende discos de segunda mano, por si quieres pasar a comprar alguna joya musical. Abre todos los días a eso de las 15.30 h hasta las 3h.
Teatro Duque La Imperdible
Pasar una noche diferente es posible gracias a esta sala con multitud de actividades.
Hora del teatro.
El Teatro Duque está gestionado por la compañía de Teatro y Danza Producciones Imperdibles, de ahí su nombre: Teatro Duque La Imperdible. Ubicado en la plaza del Duque de la Victoria, abrió en los años 90 y durante mucho tiempo fue referente en el mundo del teatro y de la danza contemporánea de Sevilla. En 2007 cerró por la creación de pisos en el terreno donde estaba ubicado, pero por suerte la sala se reabrió. Hoy en día se está a la espera de que el Teatro Duque abra al público en la calle Torneo. Esta sala es la mejor opción para pasar noches divertidas o de teatro dramático para todas las edades; además, en su programación tienen una selección de conciertos que no te puedes perder.
Avenida 5 cines
Si te gusta el cine, y más en versión original, no dejes de ver su cartelera.
Para los cinéfilos.
En Sevilla, el ocio no sólo está relacionado con el tapeo, salir de fiesta o visitar museos, también tienes opción de ir a ver alguna buena película de autor en los cines Avenida 5 Cines situados en la calle Marqués de Paradas. Aquí puedes encontrar tanto películas en versión original como dobladas. Su cartelera trae muchas que han recibido importantes premios en festivales como Sundance, Berlinale o Tribeca, por eso este cine se ha convertido en uno de los referentes en cuanto a versión original de la ciudad. Verás que por fuera no llama mucho la atención, ya que su estética se ha quedado obsoleta, pero si tienes ganas de una buena película, ¡no te arrepentirás!
El Perro Andaluz
Disfruta de la noche mientras te tomas algo en este bar tan especial.
El bar cultural por excelencia.
Buñuel no sólo estuvo presente en el cine, también lo está de alguna forma en este bar que lleva el nombre de una de sus más famosas películas surrealistas. El local es muy acogedor y tiene muchísimo ambiente, frecuentado por gente variada como bohemios, estudiantes o intelectuales. Éste es un bar que ofrece un sinfín de actividades: exposiciones, conciertos, poesía con poetas sevillanos, teatro... Consulta los horarios de sus espectáculos en la web perroandaluz.es o acércate al Perro Andaluz a ver qué sorpresa cultural te depara este bar con nombre de cine. Lo encontrarás en la calle Bustos Tavera y abre todos los días, ¡no hay excusa para no salir y disfrutar la noche sevillana!
Bar Ego
No es un bar, ni una tienda, ni un restaurante; en realidad es un lugar donde hay de todo un poco.
Tómate algo, compra ropa o escucha música.
Este lugar es una mezcla entre bar con dj´s, restaurante, tienda de ropa y galería de arte, situado en la calle Calatrava, en la zona de la Alameda y muy cerca del canal de Alfonso XIII. En la entrada verás que pone restaurante-café y sala de tendencias y arte, y sí, el bar Ego es eso y más. Acércate a comer algo al mediodía o a tomar una copa por la noche. En su carta encontrarás cocina mediterránea mezclada con la asiática, con un precio que varía entre los 15 y 20 €. Además, hay sesiones de dj´s los jueves, viernes y sábados. Si lo que buscas es un sitio con varios ambientes, agradable, ecléctico y donde puedas ir tanto de día como de noche, ¡Ego es tu bar en Sevilla! Eso sí, los lunes cierran.
El Garlochi
Después de una procesión en Semana Santa es el momento ideal para ver el local en su mayor esplendor.
Un lugar muy típico.
Si visitas Sevilla en Semana Santa, probablemente encuentres este bar abarrotado; en otras épocas del año también está lleno, pero no tanto. Tiene una decoración muy pomposa y barroca, con una mezcla de toque kitsch. Sin duda, es un bar curioso y lleno de bohemios y artistas. Si eres fan de la cantante Isabel Pantoja, sabrás que se llama como una de sus canciones. En su decoración encontrarás vírgenes, retratos de santos, figuras religiosas, un altar con un ángel lleno de flores a la entrada, retablos, cristos... Pero su esencia, sin duda, la encontrarás en la Sangre de Cristo y en el agua de Sevilla, bebida típica del Garlochi preparada con vodka, whisky y granadina. Encuéntralo en la calle Boteros, en pleno casco histórico de la ciudad.
Bar Las Teresas
Cualquier hora del día es buena para visitar este bar y tomarte uno de sus vinos.
Un bar de toda la vida.
El típico bar de toda la vida: local, tradicional, lleno de patas de jamón colgando y paredes llenas de fotos y azulejos. Lo encontrarás en la calle Santa Teresa, en el barrio de Santa Cruz, una zona llena de laberintos y calles estrechas. En el bar Las Teresas podrás tomar un delicioso desayuno, un plato de su cocina tradicional o una copa, es decir, es ideal para venir por la mañana, a comer, cenar o a disfrutar de un combinado con el que ambientar la noche. Este bajo de 1870 se conserva muy bien para los años que han pasado por aquí. En realidad, antes era una tienda de comestibles, luego fue bodega y ya en 1971 se convirtió en el café-bar Las Teresas. ¡No te vayas sin probar sus caldos tintos y blancos con un buen jamón ibérico!
Parque de Maria Luisa
Un lugar donde respirar, pasear e imaginar las historias que guarda.
Un jardín privado que se ha convertido en el pulmón de Sevilla.
En 1893 fue la duquesa de Montpensier, Infanta María Luisa Fernanda de Borbón, quien donó este jardín a Sevilla. Era el jardín privado del Palacio de San Telmo, y se abrió al público en 1914. Gracias a este parque, Sevilla respira aire puro, convirtiéndose en un punto verde muy importante para la ciudad. El parque de Maria Luisa tiene cuarenta hectáreas, y verás que el centro del parque es el Monte Gurugú, con la Fuente de Los Leones, la Isleta de los Patos o el Estanque de los Lotos. No dejes de visitar esta pequeña joya en la que perderse tanto en verano como en invierno, y en la que verás reminiscencias renacentistas y arábigoandaluzas. Puedes visitar el parque todos los días de 8h a 22hs.
Archivo General de Indias
Aunque no busques ningún documento, visítalo y disfruta la arquitectura del edificio.
El archivo de las colonias españolas.
En este archivo de gran referencia nacional e internacional, encargado por Carlos III, se guarda toda la documentación relacionada con la administración de las colonias españolas, con más de ocho mil dibujos y mapas de colonias. Tan importante es el archivo de Indias,
que la Unesco lo declaró Patrimonio de la Humanidad en 1987. El archivo se ubicó en este edificio, que es la Casa Lonja de Mercaderes de Sevilla y que merece la pena visitar para disfrutar su patio interior hecho de piedra y lleno de cristaleras y arcos. En la primera planta del edificio están las exposiciones temporales, ¡aprovecha para visitarlas! Abre todos los días y la entrada es gratuita.
Real Alcázar
Otra visita que no puedes perderte, por algo es Patrimonio de la Humanidad.
Un lugar inolvidable.
Estás ante una fortaleza declarada Patrimonio de la Humanidad, otra de las visitas obligadas de la ciudad por su interés histórico y su impacto visual. Abd Al Raman III fue quien encargó este espectacular conjunto de palacios. Una muralla rodea los palacios, jardines y estancias que forman este conjunto: el palacio mudéjar o de Pedro I, el palacio gótico y sus espléndidos jardines, que son la parte esencial del Alcázar. Algunos de los más sobresalientes son los Jardines de Mercurio,
los Jardines del Príncipe o el Jardín de Troya. La entrada general cuesta casi 9 €, y todos los lunes de abril a septiembre de 18h a 19h o los lunes de octubre a marzo de 16h a 17h, la entrada es gratuita. ¡Visita el Real Alcázar y no lo olvidarás!
Casa de Pilatos
Bello tanto fuera como dentro, ¡visítalo y viaja al pasado!
¡No te pierdas su interior!
Maravilloso y armonioso palacio gótico-mudéjar ubicado en la Plaza de Pilatos, en el casco histórico de Sevilla. El edificio se construyó a finales del siglo XV y, aunque la crestería es gótica, también tiene elementos platerescos y renacentistas. Un matrimonio de nobles sevillanos, Pedro Enríquez y Catalina de Ribera, compraron esta propiedad en 1483 y comenzaron la construcción del palacio. Tiene un patio principal decorado con muchos azulejos, así como una fuente y varias columnas coronadas con arcos. Además, la planta alta del edificio alberga una colección de tapices y pinturas. ¡Visítalo y admíralo tanto por fuera como por dentro! No olvides consultar sus diferentes horarios según la época del año.
Pabellón Mudéjar
Dentro del parque, este edificio mezcla diferentes estilos y usos.
Un edificio con mucho por ver.
Junto a la Plaza de España encontrarás este edificio, dentro del parque de María Luisa, que se puede visitar de martes a domingo y que actualmente acoge el Museo de las Artes y Costumbres Populares. Se construyó entre 1911 y 1914 y es obra de Aníbal González para la Exposición Iberoamericana de 1929, pero por entonces tenía otro nombre: Pabellón de Arte Antiguo. Verás que el edificio está frente a un lago y forma parte del movimiento arquitectónico regionalista, que recupera materiales de épocas pasadas. Por ejemplo, podrás comprobar que tiene elementos del arte neomudéjar, que mezcla califales, mozárabes, almohade y nazaríes. La verdadera belleza de este edificio está en el exterior. Por su parte, en 1972 se inaugura el Museo de Artes y Costumbres Populares dentro del pabellón Mudéjar. Tendrás la suerte de ver en su vestíbulo la única vitrina expositora que se hizo para la Exposición Iberoamericana.
Plaza de España
Esta plaza, uno de los lugares más bellos de Sevilla, no deja indiferente a nadie.
Una belleza deslumbrante.
Estás en la plaza más importante de Sevilla y una de las más espectaculares de la ciudad. Cuando el rey Alfonso XIII la vio en 1928, dijo: 'Señores, yo sabía que esto era bonito, pero no tanto'. Y así es. La Plaza de España está situada en un lateral del Parque María
Luisa, cerca de la estación de tren de San Bernardo, en pleno centro. Puedes entrar por la avenida de Isabel la Católica, por Nicolas Alpériz o por la avenida Portugal. Aníbal González fue el arquitecto al que se le encargó esta joya sevillana que, finalmente, fue inaugurada por Alfonso XIII en el año 1929. Esta plaza tan colorida te sorprenderá con los detalles de las paredes de los bancos que la rodean. Déjate enamorar por las decoraciones de azulejos con dibujos de las 48 provincias españolas.
Puente de Triana
Con una larga historia, es la unión de dos barrios muy característicos.
El paso a Triana.
Éste es el nombre popular por el que se conoce al Puente de Isabel II. Los ingenieros franceses Ferdinand Bennetot y Gustavo Steinacher se encargaron de la construcción del nuevo Puente de Triana, que se hizo entre 1845 y 1852 con hierro y piedra. Este puente sustituía así al anterior, llamado Puente de Barcas. Este puente del casco antiguo cruza el río Guadalquivir y une el barrio de El Arenal con el de Triana, y fue en su día el puente de hierro más antiguo que se conservaba en nuestro país. Es muy bonito ver este puente de siete metros desde lejos, porque así se puede contemplar su amasijo de hierros. Ya sea de noche como de día, el puente de Triana tiene un encanto diferente.
Torre del Oro
Con su espíritu de defensa, esta torre te maravillará al caer el sol.
Un símbolo de Sevilla.
La Torre del Oro, ubicada junto al río, se construyó en 1221 como parte de las murallas del Alcázar. Su objetivo era meramente defensivo, de ahí el emplazamiento que ocupa. Ha sido en la historia un monumento muy característico e importante de Sevilla. Está formada por tres cuerpos: el primero es almohade y está dividido a su vez en tres niveles repartidos a través de arcos; el segundo cuerpo mide ocho metros y medio; y el tercero es la linterna circular que da a la terraza y a la que se llega subiendo por la escalera de caracol. Verás que en los días de atardecer la torre parece que se ilumina debido a la proyección del sol. ¡Todo un espectáculo!
Giralda
Uno de los puntos clave de la ciudad que no te puedes perder.
El campanario más famoso.
Es el campanario de la catedral de Sevilla y la única pieza que se conserva de la antigua mezquita de finales del siglo XII que existía donde se encuentra la actual catedral. Se pueden distinguir en él varias partes: empezando desde abajo, está el 'cuerpo de campanas'; encima está el 'cuerpo del reloj'; 'el cuerpo del pozo', que tiene una inscripción bíblica; 'el cuerpo de las estrellas'; 'el cuerpo de las carambolas', con piedras esféricas; 'el penacho; 'la tinaja', donde está la escultura de la veleta; y el famoso 'Giraldillo'. Éste último es la escultura femenina que corona la Giralda y que fue realizada entre 1566 y 1568. ¡No te vayas de Sevilla sin subir a la Giralda por sus rampas! Los horarios de visita coinciden con los de la catedral y dependen de la época del año.
Catedral de Sevilla
Primera parada obligatoria en la ciudad, tanto por su historia como por su interior y su campanario.
Mezcla de estilos y épocas.
Oficialmente se llama Catedral de Santa María de la Sede de Sevilla. Es una iglesia del siglo XV que tardó más de cien años en construirse y que ha pasado por varias etapas arquitectónicas: mudéjar, renacentista, gótica, barroca y neoclásica. En el siglo XII era la Gran Mezquita Aljama de la época almohade y hoy en día es la catedral gótica y católica más grande del mundo. Tiene un campanario muy famoso, que es la torre de la Giralda, el único elemento que se conserva de la mezquita. Como dato curioso, debemos mencionar que el templo tiene los restos mortales de Cristóbal Colón y Alfonso X el Sabio, entre otros. Esta catedral es de visita obligada no sólo por el pasado que recoge, sino por su grandeza y singular arquitectura. La catedral puede visitarse todo el año, con distintos horarios en invierno y en verano, y la entrada general cuesta 8 €.
Documentación para viajes de turismo
Encuentra tu viaje a Sevilla